Si tuvieras una lámpara mágica que te concediera 3 deseos, ¿qué pedirías? ¡Pues deseos infinitos, obviamente! Esta pequeña “guía introductoria” puede que no te resuelva la vida, pero es un muy buen lugar para empezar a entender que tú puedes ser esa lámpara que conceda lo que deseas.
Esta guía puede ser algo teórica, por lo que para poder hacerla más suave y digerible, la voy a partir en bloques con un ejercicio práctico al final de cada uno.
¿Quién soy? El primer bloque está enfocado a explicar cómo somos, por qué somos como somos, para poder respondernos ¿soy quien quiero ser?
¿En dónde estoy? El segundo bloque es una introducción a los dos estados del ser. Ya que sé quién soy, ¿estoy donde quiero estar?
¿Quién quiero ser? Este tercer bloque es una mezcla teórica-práctica para empezar a vivir esa vida que queremos. Bienvenido a tu vida, ¿qué vas a querer para llevar?
¿Quién soy?
Muchos de nosotros nos hemos hecho la famosa pregunta del millón, “¿quién soy?”
Objetivamente, y si lo queremos hacer sencillo, somos el resultado de reacciones, creencias y hábitos que tenemos. Donde mis hábitos son un conjunto automático e inconsciente de comportamientos, pensamientos y sentimientos*.
Lo que pensamos nos lleva a tomar ciertas decisiones; al tomar estas decisiones, vamos generando actitudes y se construye nuestro comportamiento; nuestra actitud es el canal por medio del cual vivimos una experiencia, y cada experiencia nos genera un sentimiento; cómo me siento determina el tipo de pensamientos que tengo**.
Ahora, tiene sentido que esto que sentimos nos lleve a pensar de cierta forma, ¿no crees? Y así, el ciclo se va reforzando poco a poco, y empieza a tomar forma nuestra realidad – o nuestra percepción de ella, mínimo.
*Importante leer el blog de ABC de las emociones para poder entender la diferencia entre emoción y sentimiento.
**Dato geek importante. Ley de Hebb: las neuronas que se activan juntas, refuerzan su conexión. Es decir, entre más tiempo me quede en este “loop”, más fuerza toma, más determina mi personalidad = se vuelve mi realidad.
Ejercicio — Observa ¿qué pensamientos predominan en ti durante el día?, ¿qué sentimientos evocan esos pensamientos?. Sin juzgarte y sin querer resolver nada, simplemente observa la relación que existe entre ellos y anótalo.
¿En dónde estoy?
Existen dos estados en los que podemos estar: Estado de Supervivencia o Estado de Creación.
El Estado de Supervivencia es un estado natural, instintivo en donde se busca “la conservación de la vida”. Entramos en este estado cuando percibimos que estamos bajo una amenaza o posible amenaza (la mayoría de las veces estamos aquí). Entra el famoso lucha (fight), huída (flight) o parálisis (freeze). En donde el cuerpo libera cortisol (hormona del estrés) a las partes del cuerpo que necesiten energía para resolver la amenaza.
- A la hora de estar estresado, el pensamiento gira en torno a tres dimensiones:
- Cuerpo – ¿Cómo salgo de aquí?
- Ambiente – ¿A dónde necesito moverme?
- Tiempo – ¿Qué me separa de aquí y allá?
- La emociones de miedo, ira o tristeza son las emociones principales del estrés, y por ende vivimos de forma egoísta (buscando resolvernos primero para poder sobrevivir).
- Existe poca coherencia entre la mente (lo que pienso) y el corazón (lo que siento). Cómo me quiero sentir no tiene mucha relación a cómo me siento, porque mi mente está más ocupada en resolver el tema que esté teniendo en ese momento: “¿cómo voy a ganar más dinero?”, “¿qué pasa si no puedo salir de esta situación?”, “¿y si nunca sucede esto que quiero?”
- Nos identificamos cada vez más como individuos, separados de un todo para poder resolver más fácil una cosa a la vez. Vivimos para cambiar el entorno y poder aliviarnos de la incomodidad dentro de nosotros mismos.
- Anhelamos lo conocido porque sentimos que perdemos el control y buscamos la forma de asegurarnos al predecir el futuro inmediato basados en la memoria, o lo conocido del pasado. (de aquí salen los patrones de conducta)
- En este estado, reducimos la fuerza de nuestro campo cuántico para poder generar los químicos necesarios que pide el cuerpo (todos tenemos un campo cuántico de aprox. 2m de diámetro que nos permite traducir vibraciones en información para poder movernos en el mundo energético)
- No vemos muchas posibilidades porque no es momento de crear. El objetivo es resolver para después poder “ser”.
El Estado de Creación se vive cuando dejamos de gastar nuestra energía en querer resolver el mundo material. Re-dirigimos nuestra atención y energía a las posibilidades que no conocemos.
- Nos dejamos de mover por el condicionamiento del pasado, lo que nos permite relacionarnos con el futuro desde menos “certidumbre” y más “fé” (fé entendida como hacer lo que puedo con lo que tengo, sin contar con el resultado).
- Amor, felicidad, confianza, y gratitud son las principales emociones que rigen este estado.
- En este estado sincero, somos menos egoístas y nuestra atención migra de nuestro cuerpo, nuestro ambiente y del tiempo. Nos sentimos menos separados y más conectados. Como no estamos queriendo resolver, dejamos la parte individual de lado (porque no nos sirve en este momento) y comenzamos a experimentar más unidad con lo que nos rodea.
- Nuestro cerebro y corazón están en coherencia y lo desconocido se convierte en un mundo de posibilidades. Los pensamientos sincronizados con sentimientos positivos, generan una congruencia entre mente y corazón, que nos permite experimentar la vida desde una “realidad nueva”.
Empiezo cambiando mi relación con la vida, en lugar de cambiar a la vida.
Ejercicio — ¿Cuándo te has sentido en Estado de Creación? ¿qué pensamientos y sentimientos surgieron? Conscientemente, programa pensamientos o sentimientos que te acerquen a este estado.
¿Quién quiero ser?
Cuando deseamos o queremos algo, generalmente lo hacemos desde la carencia y por ende, experimentamos separación. Generamos estrés y eso nos enfoca aún mas en el mundo material. Para crear, hay que disociarnos del mundo tridimensional, experimentando la posibilidad del momento presente.
Para crear sólo necesitamos saber 3 cosas:
- Sólo podemos crear desde el momento presente.
- El campo cuántico (de donde nos conectamos a esta energía) se experimenta con consciencia, no con los sentidos.
- La gratitud es el sentimiento con mayor frecuencia vibratoria.
Entre más delgada la línea entre la mente consciente y subconsciente, más sugestionable y “como niño” podemos absorber nuevos pensamientos, hábitos y comportamientos. Así es como “reseteamos” nuestra mente para nuevos patrones de pensamiento-sentimiento. 43
- Decreta eso que deseas en sentimiento
- En lugar de visualizar “el coche azul”, explora cómo te quieres sentir con el coche azul = seguro, libre, etc. Cualquiera que sea la emoción, permítete explorarla en ti, ¿cómo se siente estar “seguro”?
- Permítete experimentar este sentimiento a manera de agradecimiento
- “Gracias (vida, universo, Dios, etc) por la oportunidad de experimentar la libertad, la seguridad, etc.”
- De todas las posibilidades que existen, en este momento estás pudiendo experimentar sensaciones de amor, y todo esto, viniendo de ti.
- Percibe el sentimiento desde el momento presente
- Experimenta esta nueva realidad desde la posibilidad del momento presente.
- “Estoy agradecido por la seguridad que me da tener un coche azul”
- Observa tu nueva relación con la vida desde una perspectiva de amor, de libertad y gratitud por lo que sucede.
- Bienvenidx a la vida que quieres.
Empezar a crear la realidad que quieres es posible ¡porque la realidad que vives es producto de tu personalidad! No te enganches en el cómo, cuándo, dónde y con quién. Esos detallitos déjaselos a un poder superior a ti (llámale Dios, universo, naturaleza, energía, orden o como te haga más sentido).
Toma una pausa, respira y recuerda que hoy como estés, en donde estés, y quien estés siendo, es perfecto. Ya eres el/la que buscas.
Aquí abajo te dejo un link con una meditación guiada para empezar a manifestar esta realidad que quieres.